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Uníon de Santa Fe empató con Cruzeiro en Brasil y, consumada la eliminacion de la Copa Sudamericana, piensa en el Torneo Clausura de la Liga Profesional donde deberá sumar puntos para no perder la categoría.
El Tatengue arrancó el cotejo un tanto perdido, sin control de balón ni asociación en equipo. Sin embargo, no sufría en su área y a Tagliamonte no se le presentaba trabajo.
El primer tiempo siguió transcurriendo sin sobresaltos, hasta que Fascendini a los 40 minutos palmó la suela de su botín contra el tobillo de Murillo. El árbitro Blas Romero solo sancionó con amarilla, pero el VAR llamó y cambió la tarjeta por roja.
El rojiblanco parecía que salía al segundo tiempo a resguardarse un poco más y cuidar el resultado, y así fueron los primeros 15 minutos, pero el elenco de Belo Horizonte solo trataba de inquietar. La escuadra de Madelón atacaba con contras, algunas peligrosas pero sin la definición final, algo que caracterizó a Unión a lo largo del año. La última del partido fue para Cruzeiro, un centro que Villalba que cabeceó Bolasie y Tagliamonte mandó al córner. 0 a 0 final y un punto para cada uno.
Con el diario del viernes, ni el hincha tatengue más pesimista imaginaba disputar este partido sin pelear por nada. En los planes el equipo brasilero era el que se quedaba con el primer puesto del grupo, Unión y Palestino disputarían la segunda ubicación y Mushuc Runa sería “La Cenicienta” del grupo, pero pasó todo lo contrario. Este último primero, dominando la zona y sacando 7 puntos de distancia al conjunto de Chile.
El mal presente de Uníon: la importancia del Clausura
El futuro unionista prende de un hilo, y se aproxima un Clausura más que caliente. Está obligado a cambiar la fea cara que mostró este semestre y sumar por la pelea del descenso, donde ahora mismo está a un punto de perder la categoría. No hay novedades en cuanto a altas, pero deben ser muchas gracias al bajo nivel de jugadores actuales, caso Mauro Pittón, Fragapane o Cardozo.
Por otro lado, se avecina la salida de José “Tin” Angulo, que solo disputó 56 minutos con la roja y blanca y no rindió como se esperaba.
