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En un partido parejo, trabado y con pocas situaciones claras, Huracán perdió 1-0 frente a Platense en la gran final del Torneo Apertura disputada en Santiago del Estero. El gol de Guido Mainero en el segundo tiempo marcó la diferencia en un encuentro donde el Globo propuso, presionó y buscó, pero no logró romper el cero.
El conjunto dirigido por Frank Darío Kudelka asumió el protagonismo desde el arranque. Con Mazzantti incisivo por derecha y Urzi activo por izquierda, Huracán intentó abrir el campo y lastimar con movilidad y desmarques. Miljevic manejó la pelota en la mitad de la cancha y tuvo participación en las principales aproximaciones, pero Cozzani respondió bien ante las diferentes aciones generadas por el Globo.
Platense, por su parte, se replegó, esperó y apostó a alguna pelota parada. Y la encontró. A los 63 minutos, tras un tiro libre desde la derecha ejecutado por Taborda, Vázquez peinó en el primer palo y Mainero conectó de derecha.
El Globo fue en busca del empate, arrinconó a su rival en los últimos minutos y generó centros constantes que no lograron encontrar un destinatario claro. Platense resistió con uñas y dientes, y se aferró a una victoria que le dio el título.
El equipo de Parque Patricios se quedó sin trofeo una vez más, pero con la frente en alto desde lo futbolístico y lo actitudinal. El esfuerzo no se negoció en una gran final que se definió por detalles. Más allá del resultado, Huracán volvió a mostrarse como un conjunto serio, competitivo y con identidad, capaz de disputar mano a mano un campeonato nacional.
Ahora, el principal objetivo se traslada a la Copa Sudamericana, donde el equipo de Parque Patricios disputará los octavos de final en el mes de agosto.
