Desde la visión de Guillermo Barros Schelotto, Vélez Sarsfield falló una gran oportunidad en Vicente López.

Vélez empató 0‑0 con Platense en el estadio Ciudad de Vicente López, en un encuentro que dejó más frustración que alivio. El equipo de Guillermo Barros Schelotto controló el juego durante largos tramos, con un 61 % de posesión y contó con ventaja numérica desde los 38 minutos del primer tiempo por la expulsión de Tomás Silva por doble amarilla. Sin embargo, no pudo romper el cero ante un rival que se replegó con orden y resistió con carácter.
Vélez regresó y trajo la alerta de Bouzat
Desde el arranque, el Fortín buscó protagonismo, con mucha circulación por los costados y triangulaciones que, si bien permitieron avanzar metros, no se tradujeron en peligro concreto. Los laterales ofrecieron amplitud, pero faltó profundidad. Braian Romero fue el más activo en ofensiva, ofreciendo movilidad constante, aunque siempre lejos del área rival.
Con un Platense condicionado por la expulsión, Vélez inclinó la cancha, pero no encontró caminos claros al gol. Le faltó cambio de ritmo, sorpresa y juego interior. El equipo abusó del pase lateral y se mostró predecible ante una defensa bien plantada. Las pocas llegadas fueron tibias, con remates sin dirección o fácilmente controlables por Cozzani, arquero del Calamar.
PALIZA MILLONARIA
Los cambios en el complemento no lograron alterar la dinámica. Vélez mantuvo el control, pero no aceleró. Y aunque Platense no inquietó demasiado, logró llevar el partido a su terreno, bajando el ritmo y cerrando los espacios.
Con este empate, el Fortín suma cuatro puntos en dos fechas del Clausura y espera a Instituto en la próxima fecha. Los números no alarman, pero la imagen sí deja dudas. En un torneo corto, partidos como este, con el rival con diez durante más de un tiempo, no se pueden dejar escapar. Barros Schelotto deberá ajustar piezas para que la posesión se convierta en algo más que una estadística.