El Cilindro de Avellaneda se llenó de tensión, expectativa y fútbol de alto voltaje este martes 23 de septiembre cuando Racing Club y Vélez Sarsfield se enfrentaron en el duelo de vuelta de la Copa Libertadores. Racing llegaba con la ventaja mínima de 1-0 obtenida en Liniers, con gol de Adrián “Maravilla” Martínez, y Vélez necesitaba ganar por al menos un gol para empatar la serie.
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Por Paloma Audano
Vélez visitó a Racing en el Cilindro de Avellaneda por el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores y perdió 1-0 con gol de Santiago Solari. El Fortín quedo eliminado de la competición.
UN FINAL DE MARAVILLA
Desde el pitazo inicial, Racing tomó la iniciativa. Con la posesión y mando del balón, buscó abrir el marcador cuanto antes para tranquilizar la serie. Los laterales y los volantes externos presionaban con intensidad, en tanto Adrián Martínez y Santiago Solari intentaban generar peligro con movimientos hacia la zona de definición. Vélez, por su parte, se mostró ordenado defensivamente, cerrando líneas medias, apelando al contragolpe, aunque le costaba salir con claridad. 
Hubo dos o tres llegadas de Racing destacables. Tiros de Almendra desde fuera del área, alguna pelota parada que generó incomodidad en la defensa de Vélez y centros que exigieron a Marchiori. Para Vélez, lo más cercano vino justo antes del final del primer tiempo. Una jugada de Machuca que pudo haber sorprendido, pero la defensa local logró cortar. El primer tiempo cerró 0-0.
En el segundo tiempo, Vélez salió con mayor determinación, sabiendo que el reloj corría en su contra. Intentó apretar más en mitad de cancha, adelantar líneas, apostando a la profundidad de Machuca e incorporaciones ofensivas de jugadores como Bouzat. Racing, consciente de su ventaja, se replegó un poco, buscando espacios para salir de contra, con Solari y Martínez como referencias. 
A mitad de la segunda etapa se vivió un momento clave: Vélez creyó haber anotado a través de Machuca, pero el VAR determinó que la pelota no había entrado completamente (o estaba en una posición dudosa), anulando el gol. Fue un alivio enorme para Racing, que sostenía su ventaja momentáneamente. 
A los 82 minutos, llegó el golpe definitivo, Santiago Solari apareció sorpresivamente en el segundo palo para empujar la pelota al fondo de la red, tras un centro bien ejecutado que desacomodó a la defensa de Vélez. Ese gol significó el 1-0 en la vuelta y selló un global de 2-0 para la Academia. 
Sin embargo, es sabido que Velez sufrió la baja de Lisandro Magallán, expulsado en el partido de ida. Esto provocó que se debilitara su defensa para este partido clave. A su vez, Racing tuvo jugadores amonestados, situaciones de tensión, pero supo manejar los tiempos. El arquero local. Facundo Cambeses, también tuvo intervenciones importantes.
En conclusión, Racing mostró carácter, solidez y efectividad cuando más lo necesitaba. Dominó buena parte del partido, sufrió momentos de presión, pero resistió el empuje de Vélez, anuló los intentos ofensivos del rival y aprovechó su ocasión clave para definir la serie. Vélez, pese al esfuerzo, las ganas y algunos pasajes de buen fútbol, no pudo quebrar la resistencia rival ni tuvo la puntería necesaria.
Con este triunfo, Racing avanza a las semifinales de la Copa Libertadores 2025. Ahora esperará rival: el vencedor del cruce entre Estudiantes de La Plata y Flamengo.